Suprema Corte de EEUU detiene deportaciones a El Salvador por Ley antigua
En una decisión inesperada y emitida a altas horas de la noche, la Corte Suprema de Estados Unidos intervino para detener las deportaciones de ciudadanos venezolanos que la administración del entonces presidente Donald Trump planeaba llevar a cabo invocando la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798.
La orden judicial, respaldada por una votación de 7 a 2 de los magistrados, específicamente instruyó al gobierno a no expulsar del país a ningún miembro del grupo de detenidos venezolanos hasta que el propio tribunal emitiera una nueva orden. Esta acción respondió a una apelación de emergencia presentada por abogados que representaban a estos inmigrantes.
Los principales actores en esta noticia son, en primer lugar, la Corte Suprema de Estados Unidos, que tomó la decisión de detener las deportaciones. En segundo lugar, la administración del entonces presidente Donald Trump, que era la entidad que planeaba y estaba llevando a cabo las deportaciones bajo la mencionada ley.
También son cruciales los abogados de varios inmigrantes venezolanos, quienes presentaron una apelación de emergencia ante la Corte Suprema en un intento por evitar la deportación de sus clientes a la prisión de máxima seguridad CECOT en El Salvador.
Adicionalmente, se menciona a un grupo de defensa de las libertades civiles que demandó a la administración por las deportaciones previstas de venezolanos detenidos en el norte de Texas. Finalmente, se hace referencia a Lee Gelernt, abogado de la ACLU, quien presentó nuevas pruebas sobre la notificación de deportación que estaban recibiendo los migrantes.

Suprema Corte de EEUU detiene deportaciones a El Salvador por Ley antigua
La decisión de la Corte Suprema se tomó y emitió en altas horas de la noche de un día no especificado en el texto, aunque se infiere que fue inmediatamente después de una «apresurada mañana» en la que los abogados de los inmigrantes venezolanos presentaron su apelación de emergencia. La audiencia en la que el abogado de la ACLU presentó las nuevas pruebas tuvo lugar el viernes anterior a la orden del sábado emitida por el Tribunal Supremo. Este sábado, la Corte Suprema formalizó su orden al gobierno de no realizar las deportaciones.
Los eventos se desarrollaron en el sistema judicial de los Estados Unidos. La apelación de emergencia fue presentada ante la Corte Suprema de Estados Unidos, ubicada en Washington D.C. Las deportaciones planeadas estaban dirigidas hacia la prisión de máxima seguridad CECOT en El Salvador, lo que implica que los inmigrantes venezolanos se encontraban detenidos en centros de detención dentro de los Estados Unidos, específicamente en un centro en el norte de Texas, desde donde se originó una de las demandas.
La intervención de la Corte Suprema se produjo en respuesta a la preocupación de que la administración Trump estuviera procediendo con deportaciones sin garantizar un proceso adecuado para que los inmigrantes venezolanos pudieran impugnarlas bajo la Ley de Enemigos Extranjeros.
Los abogados argumentaron que sus clientes estaban siendo notificados de su deportación con muy poca antelación y sin una clara vía para apelar. La Corte Suprema pareció mostrarse receptiva a estos argumentos, tal como se evidencia en su orden de detener las deportaciones hasta nueva orden.
Además, la decisión se dio en un contexto en el que otro tribunal federal de apelaciones también había bloqueado la eliminación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para otros migrantes venezolanos, lo que sugiere una creciente oposición legal a las políticas migratorias de la administración en relación con esta nacionalidad.