Más de 400 líderes empresariales impulsan estrategias para generar empleo y atraer inversión al país
Costa Rica es epicentro de diálogo sobre inversión, talento e innovación
Más de 400 líderes empresariales, autoridades de gobierno y expertos internacionales participan hoy en el VIII Congreso de Zonas Francas, un espacio clave para debatir sobre inversión, innovación y talento humano. Este foro se desarrolla en un contexto retador para la atracción de Inversión Extranjera Directa (IED) y busca fortalecer el papel de Costa Rica como un destino competitivo en la región.
El encuentro, organizado por la Asociación de Empresas de Zonas Francas de Costa Rica (AZOFRAS), se consolida como una plataforma de alto nivel para analizar los retos y oportunidades del régimen. Los participantes abordan temas como la inteligencia artificial, la sostenibilidad energética, la nueva geopolítica global y la evolución del talento humano, factores determinantes para el desarrollo económico del país.
Según Ronald Lachner, presidente de AZOFRAS, “las discusiones que se llevan a cabo hoy son fundamentales para trazar la hoja de ruta que nos permitirá mantenernos vigentes y relevantes en el ámbito internacional”. Además, destacó que el trabajo conjunto entre el sector público, privado, académico y la sociedad civil es esencial para construir un futuro más próspero y sostenible para todas las personas.

Más de 400 líderes impulsan estrategias para generar empleo y atraer inversión al país
El Ministro de Comercio Exterior, Manuel Tovar, resaltó que “este régimen de zonas francas impulsa buena parte del desarrollo económico de Costa Rica, genera más de 265.000 empleos directos e indirectos y aporta cerca del 15% del PIB nacional”. Añadió que el Gobierno mantiene el compromiso de fortalecer la competitividad y promover un clima de negocios favorable para las inversiones.
Por su parte, Laura López, Gerente General de PROCOMER, subrayó que el Régimen de Zona Franca concentró el 74% de la IED del país al 2024, canalizando más de $3.700 millones. Este modelo beneficia directamente a miles de familias costarricenses, al diversificar las exportaciones, generar empleos de calidad y fortalecer la economía nacional. De esta forma, el congreso no solo impulsa la competitividad, sino también el bienestar social y el desarrollo sostenible de Costa Rica.







