816 vecinos de la Unión piden prueba de anticuerpos por dudas en vacunación

Luego de dos semanas de intenso trabajo con jornadas en sábado y domingo la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) completó la primera fase de la intervención en el área de salud de La Unión para dar respuesta a las personas que se pudieron sentir afectadas por la noticia de que un funcionario aparentemente simuló una vacunación.

La primera fase de la intervención consistió en contactar a los vecinos para ofrecerles una vía de atención integral, pues ellos figuraban en las listas como personas atendidas por el funcionario investigado por la presunta irregularidad al protocolo.

El objetivo fue ofrecer consulta integral donde se considerarían las condiciones de su vacunación y se evaluarían algunas opciones con los médicos para buscar un mayor grado de seguridad frente a la incertidumbre de estar expuestos a la enfermedad.

Primeros resultados 

En total la Caja contactó a 1 457 personas de las cuales un grupo de 641 manifestaron estar satisfechas con la vacunación (44%); entre ellos están los 72 vecinos con exámenes realizados en laboratorios privados, cuyos resultados revelaron anticuerpos presentes.

La consulta también reveló que 816 personas (el 56%) solicitaron exámenes de anticuerpos como una manera de tener más información frente a la duda de estar vacunados o no, aunque se les explicó que los resultados de los exámenes de anticuerpos pueden ser inciertos.

Este grupo descartó haber presentado alguna de las reacciones leves ante la vacuna ni reportó haber tenido covid después de asistir al vacunatorio, pero optó por solicitar el examen de anticuerpos ante la inseguridad causada por la difusión del caso investigado.

Lamentablemente un grupo de 56 personas no pudieron ser contactadas, pese a los múltiples intentos de llamados a los teléfonos sin respuesta o por los números registrados en el EDUS sin correspondencia con la persona buscada. El área de salud tratará de hacer la búsqueda presencial como último recurso para establecer contacto.

Segunda fase comienza de inmediato

El grupo solicitante del examen de anticuerpos está enlistado para citarlos y tomarles la muestra de sangre, aunque se conoce que su indicación general está fuera de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en las campañas de vacunación, pero que puede ayudar en alguna medida a que las personas puedan sentirse más seguras frente al riesgo de enfermedad por covid-19.

Esta semana el trabajo de la segunda fase se concentrará en hacer coordinaciones pertinentes en logística, provisión de insumos para los laboratorios y la programación de citas para proceder en las próximas dos semanas al proceso de toma de las muestras.

Cada uno será contactado para darle cita con día y hora determinada. Algunas personas encamadas serán visitadas para recoger la muestra. El resultado se les anunciará cuando las muestras del grupo hayan sido procesadas mediante otra llamada de seguimiento realizada por los médicos participantes en la intervención, que fueron debidamente capacitados para esta intervención.

El resultado del examen informará si hay anticuerpos “presentes” o “ausentes” y se les explicará a las personas qué significado tiene eso, pues el interesado habrá de considerar cuestiones médicas pocas veces difundidas a nivel general, que ameritan una reflexión reposada, sin saltar a una conclusión rápida, para determinar el siguiente paso que, en un último escenario posible y por recomendación médica, podría ser una dosis de refuerzo.

¿Por qué los anticuerpos no son una prueba definitiva?

Los especialistas afirman que el examen solo mide una parte de la superficie de la respuesta del sistema de defensas. Si bien el examen detecta los anticuerpos contra el virus generado por el propio sistema inmune los inmunólogos señalan que debe atenderse otros aspectos científicos que impiden llegar a una conclusión segura sobre si la persona fue vacunada o no a partir del resultado.

Esto significa que la persona debe considerar varias ideas para evaluar su situación cuando tenga el reporte del resultado.

La primera idea es conocer que el resultado de anticuerpos “presentes” o “ausentes” puede tener distintos significados. Los anticuerpos presentes no significan que ellos fueran creados por la vacuna, pues las defensas también pudieron haber sido desarrolladas por una infección natural sin síntomas, aún antes de la visita al vacunatorio.

La segunda idea es la importancia de conocer la complejidad del sistema inmunológico, explicada diciendo que, si se compara con la amplitud de un océano, la medición de anticuerpos es apenas la vista de una parte de la superficie y, por lo tanto, existe un profundo sistema en la red de defensas del cuerpo que está más allá de la lectura de esta prueba.

La doctora Olga Arguedas Arguedas, inmunóloga y directora del Hospital de Niños, señala que la vacuna pudo haber sido puesta en la persona y el resultado podría decir que no hay anticuerpos presentes y, aún dentro de ese resultado, el cuerpo podría tener algún grado de protección.

La doctora Arguedas se refiere a que la ciencia ha observado que los niveles sanguíneos de anticuerpos pueden caer después de transcurrido un tiempo luego de una infección aguda, o de la vacunación, pero otras armas del sistema inmune -como las células B de memoria y las células T específicas- quedan listas para actuar cuando sea necesario.

La doctora María León Bratti, inmunóloga del hospital México, también recomienda observar que las personas pueden tener reacciones diferentes a condiciones parecidas.  Hay personas que han sido inmunizadas naturalmente, porque tuvieron la enfermedad, y sin embargo eso no significa que ellas tengan una respuesta superinmune, por eso los hallazgos científicos refuerzan la idea de que todas las personas recuperadas de covid-19 deben vacunarse, afirmó la especialista.

El doctor Jorge Chaverri Murillo, especialista del hospital Rafael Ángel Calderón Guardia y director del postgrado de infectología de la Universidad de Costa Rica, comenta otro aspecto importante: el resultado positivo o negativo de anticuerpos, como respuesta única a la pregunta de haber sido vacunado o no, es una fantasía producto del sesgo en las decisiones conocido como anclaje.

Esto quiere decir que nos aferramos a informaciones tomadas como referencia, aunque no tengan lógica científica profunda.  Así la mente toma algunos datos como si fueran anclas de seguridad para tomar decisiones. En ese contexto de posibilidades el resultado de anticuerpos “presentes” será positivo, pero solo significa que la persona sabrá que su cuerpo ha formado defensas contra la enfermedad y habrá que considerar otras posibilidades.

Por ejemplo, según el doctor Jorge Chaverri, la información sobre anticuerpos tiene varias consideraciones a considerar, entre ellas las siguientes:

• Es posible recibir la vacuna y no desarrollar anticuerpos.
• Es posible tener bajos niveles de anticuerpos, que el laboratorio no pueda detectarlos y, aun así, tener protección.
• Los resultados ayudan a encontrar evidencias de si hubo contacto con el virus o la vacuna previamente.
• Los resultados no ayudan a estimar el riesgo de infección por COVID-19 en el futuro.
• Si la prueba es positiva significa que usted estuvo en contacto con el virus o la vacuna.
• Una prueba negativa no descarta que usted haya tenido contacto con el virus o la vacuna.

Según el “Instituto nacional de investigación del genoma humano” los anticuerpos son unas proteínas que forman parte del sistema inmune y circulan por la sangre. Cuando reconocen sustancias extrañas para el organismo, como los virus y las bacterias o sus toxinas, las neutralizan. Una vez el cuerpo se ha expuesto a una sustancia foránea concreta, también llamada antígeno, los anticuerpos producidos para atacarlo persisten en la sangre, ofreciendo protección en el caso que, en un futuro, volvamos a contactar con el mismo antígeno.